Juegos de nariz

El olfato es uno de los sentidos mas refinados y sensibles de un perro; la mucosa olfatoria y las glándulas olfativas permiten recibir y distinguir una amplia gama de olores.
De hecho la percepción canina del mundo esta basada en

  • 60% sensaciones olfativas
  • 30% señales acústicas
  • 10% estímulos visuales

La sensación olfativa de un perro es 2000 veces mas desarrollada que la de los humanos.

Por esta razón, al momento de jugar con el perro, podemos estimular su sentido más poderoso, el olfato y la nariz.

Aquí una lista de juegos que podemos hacer con el perro, en casa o fuera:
1) Escondite
El juego consiste en esconder un juguete del perro o un trozo de comida en alguna parte de la habitación; luego invitamos al perro a buscar. Podemos incluso escondernos nosotros y dejar que el perro nos encuentre.

2) Las cajas
El juego consiste en coger 3-4 cajas vacías o envases vacíos de plástico (lo de los yogures es perfecto) y esconder un trozo de comida debajo de una de ella; luego damos la orden al perro que busque.

3) Recorrido con obstáculos
Consiste en crear un recorrido de cajas, sillas, escaleras, obstáculos varios (usar la imaginación...) para que el perro vaya buscando los trozos de comida que hemos escondido pero con la mayor dificultad de tener que pasar a través del recorrido que hemos montado.

4) Altura
Podemos esconder comida o el juguete preferido del perro a una altura superior a la de su nariz así aprende que las cosas que hay que buscar no están siempre y solo en el suelo sino en distintas alturas del entorno.

Recordarse de no esconder siempre el mismo objeto o la misma comida: es muy importante cambiar los olores y el estimulo olfativo para que el perro no se acostumbre y siga desafiando su mente.

A disfrutar!